El Consejo de Ministros ha aprobado este martes el código de buenas prácticas para las ayudas directas a empresas y pymes que solicitaron durante créditos avalados por el Instituto de Crédito Oficial (ICO). Un código al que las entidades financieras se podrán adherir de manera voluntaria.
Este código supone la ampliación del plazo de vencimiento de los créditos ICO, la conversión de estos préstamos en participativos y la posibilidad de aplicar quitas para reducir la deuda avalada.
Se trata de un conjunto de instrumentos para ayudar a las empresas solventes a salir de la crisis económica originada por la COVID.
Los beneficiarios son empresas o autónomos que hayan registrado una caída de su facturación del 30% en 2020.
Hasta el 31 de diciembre de 2022 se podrán activar las medidas para cada empresa o autónomo.