El Consejo de Ministros ha aprobado el funcionamiento del Fondo de recapitalización de empresas afectadas por la COVID-19, cuya dotación inicial es de 1.000 millones de euros.
El Fondo está contemplado en el Real Decreto-ley de medidas extraordinarias de apoyo a la solvencia empresarial aprobado en marzo por el que se moviliza 11.000 millones de euros en ayudas directas a las empresas, mediante subvenciones, reducción de costes y refuerzo de su capital.
Para acceder a estas ayudas, la empresa no puede tener la residencia fiscal en un país calificado como paraíso fiscal ni haber sido declarada insolvente. Y debe estar al corriente en el pago de obligaciones tributarias, entre otros requisitos.
Además, debe acreditar que atraviesa dificultades de carácter temporal a consecuencia de la pandemia de la COVID-19, es decir, que la cifra de negocios de 2020 se hubiera reducido en más de un 20% respecto a la de 2019 y se hubiera producido un deterioro en la estructura de capital.
Las operaciones financiadas con cargo al Fondo tendrán un importe de entre 4 y 25 millones de euros por beneficiario. Dicho intervalo será de entre 3 y 15 millones en el caso de las pymes.