Cada 20 de febrero se celebra el Día Mundial de la Justicia Social. El pasado 26 de noviembre de 2007 la Asamblea General de las Naciones Unidas en la resolución 62/10 declaró el 20 de febrero de cada año la celebración de este día mundial. En este 2018 la cita ha centrado su atención en los trabajadores migrantes y su búsqueda de la justicia social.
La igualdad de oportunidades, sostener el estado de bienestar, la lucha contra la pobreza, la distribución de la renta y la defensa de los derechos laborales y sindicales son principios incluidos desde hace once años en el marco de derechos de la Organización de Naciones Unidas. La celebración de este día busca apoyar la labor de la comunidad internacional encaminada a erradicar la pobreza y promover un empleo pleno con igualdad entre sexos y el acceso a una justicia para todos.
La Organización Mundial del Trabajo (OMT) calcula que unos 150 millones de trabajadores son migrantes, es decir, un 4,4 por ciento de la mano de obra mundial, de los cuales el 56 por ciento son hombres y el 44 por ciento, mujeres. A nivel mundial, los trabajadores migrantes tienen una tasa de actividad más alta que los locales: un 73 y un 64 por ciento, respectivamente.